"Es muy probable que la izquierda pueda acceder a posiciones importantes"
Entrevista a Fernando Cepeda Ulloa
[24 de Octubre de 2003]
El próximo fin de semana será atípico para los colombianos, dos días de urnas y votación que comienzan el sábado 25 de octubre con el Referendo y concluyen el domingo 26 con la elección de gobernadores, alcaldes, diputados, concejales y ediles para las juntas administradoras locales. El analista político Fernando Cepeda Ulloa habla de las perspectivas y la significación de ambos comicios.
�Con qué expectativas está la población respecto de estos dos días electorales que se aproximan?
Hay mucha ansiedad. Diría que el mayor problema ha sido la competencia entre la elección del sábado, al Referendo, y la del domingo, a alcaldes, gobernadores y otros cargos donde hay más de 72.000 candidatos en todo el país.
Naturalmente, en los pueblos y las ciudades, la campaña para las elecciones territoriales tiene más atractivo que la campaña del Referendo, que es más abstracta.
�Las campañas se han desarrollado con más normalidad este año que en años anteriores?
Ha habido algunos incidentes. Esta semana en Bogotá hubo tres actos terroristas con estallidos, y en otras partes de Colombia también. Pero en general hubo un ambiente de tranquilidad y creo que seguirá hasta el sábado y el domingo.
Tradicionalmente las guerrillas respetan el proceso electoral. Hacen unos actos para demostrar que existen y para intimidar en algunas zonas del país donde ellos tienen más interés. Pero el proceso electoral se ha desarrollado hasta ahora en un ambiente que podría definirse como tranquilo.
�Cuáles son los riesgos que corre el gobierno con el Referendo?
El Referendo contiene 15 preguntas de las cuales hay unas más importantes que otras. Digamos que hay dos preguntas que son fundamentales y que son lo que se ha llamado "referendo fiscal". Es decir, las que tienen que ver con el régimen de pensiones y las que tienen que ver con la congelación de salarios en el sector público (las preguntas 8 y 14). Esas preguntas, que son muy complejas y que el sólo hecho de leerlas ya tomarían más de dos o tres minutos, buscan, por un lado, ponerle un tope al sistema de pensiones en 25 salarios mínimos -porque el sistema jubilatorio se ha desbordado y existen salarios que denominamos "privilegiados" y hasta corrupción en ciertos casos-, y por el otro, autorizar, en cierta forma, al gobierno para controlar el aumento de salarios y pensiones y acotar ciertas dependencias.
En cuanto al Referendo, �cuáles son las tendencias planteadas hasta el día de hoy?
Es muy difícil. En este momento hay tres campañas. Una por el SI, que está haciendo el propio gobierno; una por el NO, que la hace un ex ministro de Hacienda del Partido Conservador, y una campaña por la Abstención, que la hace el Partido Liberal, que es el partido del Presidente aunque él ganó como disidente.
Con el Referendo, el gobierno busca luchar contra diversas formas de corrupción, de despilfarro de los dineros públicos, contra prácticas políticas perversas y ordenar el tema fiscal a partir del control de salarios y pensiones. Por esa razón, la oposición al Referendo es muy fuerte, sobre todo por parte de los empleados públicos, los sindicatos, y de algunos pensionados, parte de ellos con influencia política porque son ex congresistas.
De ahí es que se da esa dicotomía tan grande en que el presidente Uribe goza de tanto apoyo, pero parte de es misma gente que lo apoya va a votar en contra del Referendo. No hay una comunión entre el Presidente y el Referendo.
Y si el Referendo se pierde (hay muchas maneras de manera de perderlo) eso no implica que la imagen de Uribe y el apoyo que tiene hayan sufrido un deterioro. Porque la gente separa las dos cosas. Las encuestas más recientes le dan una favorabilidad del 75%, pero a su vez, esas mismas encuestas le dicen que una parte importante de ese porcentaje no está de acuerdo con el Referendo.
Para la elección del domingo se habla de un fuerte crecimiento de la izquierda y sobre todo, de la ausencia de los partidos tradicionales para estos comicios. �Esto es así?
Lo que ocurre es que el Partido Liberal cometió el error descomunal de no reconocer que el presidente Uribe, como liberal, había derrotado en las elecciones al candidato oficial del partido y que el corolario necesario de esa situación era reconocerle el triunfo y dejarlo al frente del Partido y apoyarlo. Hicieron lo contrario. Decidieron no apoyar al Presidente porque lo consideraron un disidente. Eso generó una situación muy precaria para los liberales, al punto que su candidato en Bogotá retiró la candidatura hace ocho días y decidieron apoyar a Garzón, que es el candidato del nuevo partido de la izquierda.
Por otro lado, el Partido Conservador no pudo llevar un candidato a las elecciones presidenciales porque su gente no pasaba del 2 o el 3% y tuvieron que retirarse. Y esto provocó que se desdibuje y hoy su candidato a la alcaldía de Bogotá no debe superar el 2% pese a que ha tenido una gran exposición en los medios.
Lo que ha sucedido con los liberales es un cambio histórico, muy significativo, porque antes los matices de izquierda se adherían al Partido Liberal y ahora son los liberales quienes se suman a un matiz de izquierda.
�Cómo se explica este crecimiento de la izquierda?
La cuestión es que el desarreglo de los partidos tradicionales han hecho que liberales y conservadores, sumados a parte de la izquierda vieja y a algo de la izquierda nueva, se junten en una fuerza nueva que es el Polo Democrático. Y también diría que la izquierda radical no está apoyando a Garzón. Sucede que los dos candidatos que hoy tienen posibilidades están casi empatados porque tienen apoyo de todos los estratos.
� Según como parece hasta ahora que quedaría conformado el nuevo escenario electoral, favorecería o perjudicaría al presidente Uribe?
Según mi opinión, si ganan en Bogotá personas como Lucho Garzón, o en el Valle personas como Angelino Garzón, sería constructivo porque habría nuevas fracciones políticas que aunque no estén de acuerdo con el Presidente aportarían una visión interesante para la gobernabilidad.
Es muy probable que en esta ocasión la izquierda tenga la posibilidad de acceder por la vía electoral a unas posiciones importantes, como alcaldías y gobernaciones, lo que podría posicionarla para competir con buenas posibilidades en las futuras contiendas presidenciales. Y eso está bien, porque ayuda mucho.
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